1) Lavás papas y con las cascaras bien limpia las ponés a hervir.
2) Cuando estén cocidas (si se pasan un poco no importa), las pelás y las vas rompiendo en trozos gandes, medianos y pequeños.
3) Le agregás huevos y sal (si te gusta pimienta y cebolla reahogada) y mezclás todo.
4) Calentás bien una sartén aceitada, y tirás la mezcla emparejándola por toda la superficie.
5) Cuando la veas tostadita en los bordes, la vas a dar vuelta ayudandote con una tapa o plato que puedas colocar encima.
6) La dejás hasta que te guste! si te gusta el huevo apenas cocido o bien cocido, o una costrita quemadita, vas regulando según tu gusto.
Y lista! Simple, rica, para un almuerzo liviano o para acompañar una cena más contundente!
A veces lo más simple nadie lo explica... una simple tortilla de papa (como la hacía mi mamá para cualquier mediodia)